¿De qué manera condiciona el miedo a
hablar en público?
A todos nos
pasa un poco; en el momento antes de salir a un escenario o a dar una charla
nos ponemos nerviosos, es algo natural. Por qué cuando somos el centro de atención el cerebro
se vuelve más rápido, es una reacción lógica porque en el pasado esta reacción
inconsciente nos ayudaba a alejarnos de situaciones peligrosas, es decir, es un
mecanismo con el que nacemos. De hecho lo primero que hacemos cuando vamos a
empezar una charla nos fijamos sobre todo en los que peor nos miran, no vale
razonar con el cerebro, como decíamos es algo natural.
El miedo es
natural en el prudente y el saberlo vencer es ser valiente
Por ello es
importante comprender el miedo y usar algunas técnicas que nos ayuden a
liberarnos de él. La semana pasada ya os hablamos de cómo desarrollar vuestra
capacidad comunicativa, esta semana vamos a hablar de cómo trabajar nuestras
limitaciones inconscientes, es decir, aquello que no es visible y no nos damos
cuenta tan fácilmente pero que la mayor parte de las veces son los causantes de
nuestras aprensiones.
1 · Vamos a empezar por preguntarnos qué es lo peor que
podría pasar: ¿qué me humillen? ¿Que se rían de mí? ¿Qué me tiren tomates? haz una lista con todas estas respuestas que
consideres posibles; si estás solo puedes expresarlas también de manera física,
enfurécete con esto, grita, pégale la almohada…y cuando estas emociones
negativas estén expresadas vuelve a ti, rompe en pedazos esa lista de cosas
que podrían pasar y respira tranquilamente ¡ya estás listo para pasar a otra
cosa!
Recuerda que
la gente que juzga es porque necesitan sentirse un poco mejor consigo mismos,
no es maldad, es una limitación y lo hacen de manera inconsciente, si lo haces
un poco peor de lo que lo harían ellos, se sienten un poco mejor consigo
mismos. Es su propia falta de confianza la que les lleva a juzgar.
2 · Ahora vamos a hacer una reestructuración de
nuestros pensamientos negativos, es decir, vamos a buscar qué situaciones te
bloquean, y vamos a transformar nuestros pensamientos negativos en otros
positivos que nos ayuden a sentirnos más confiados con nosotros mismos.
· Identifica
las situaciones concretas que te imponen, por ejemplo mirar a los ojos a las
personas o pensar que te vas a quedar en blanco.
· Expresa
los sentimientos que estas situaciones provocan en ti como angustia, temor,
etc…
· Ahora
profundiza un poco más y describe el pensamiento negativo que va asociado a ese
sentimiento, por ejemplo «Soy incapaz de hablar a personas que no conozco
personalmente».
· Por último
escribe el pensamiento positivo que contrarresta a este negativo, escrito
siempre en positivo, en presente, con alguna emoción positiva: «Estoy
emocionado porque cada día transmito mejor mi proyecto cuando estoy en público»
.
· Repite
estas afirmaciones al menos 10 veces al día durante un mes ¡verás el cambio!
Yo puedo
Yo Puedo
Lee también: Habla para Triunfar
3 · El tercer punto que vamos a trabajar es la seguridad
y confianza personales. En este apartado destacaría varios aspectos:
· Cuanto más
creas en lo que estás haciendo, más fácil te resultará sentir y transmitir la
pasión por lo que haces y por ende llegar a tu interlocutor con confianza ¿qué
aporta de valor a la sociedad tu proyecto? escríbelo y repítelo varias veces
hasta que lo tengas totalmente integrado.
· Por otro
lado, cuanto más pongas el foco en tu mensaje y menos en ti, es decir si te
conviertes en vehículo al servicio de un propósito que nos trasciende, más
fácil te resultará también llegar a tu público.
· No intentes
ser perfecto ¡sé auténtico! la gente perdona pequeños errores siempre que les
llegues a su corazón.
Nos encanta
«El discurso del Rey», si él pudo, nosotros también
4 · Para terminar os recomiendo que justo antes de salir
a hablar os toméis un traguito de agua (esto despista a vuestro cerebro
haciéndole pensar que si tienes tiempo para un vaso de agua es que no hay
peligro) y que hagáis unas cuantas respiraciones profundas con el abdomen
contando hasta de 10 a 1 mientras vais soltando el aire y para que practiques
en casa más ejercicios de respiración profunda puedes seguir este vídeo de Lea
Kaufman.
Como
filosofía de vida además os recomiendo que practiquéis meditación diariamente
mínimo 20 minutos, esto os ayudará a estar mucho más centrados y focalizados en
tanto para comunicar como para el resto de tareas…pero de esto hablaremos otro
día.
lee también: Impacta con tu Palabra a tu Auditorio