Salir de prisión
Dos
hombres habían compartido injusta prisión durante largo tiempo y habían
recibido todo tipo de maltratos y humillaciones. Una vez libres, volvieron a
verse años después.
-
¿Alguna vez te acuerdas de los carceleros?
-
No, gracias a Dios ya lo olvidé todo, contestó. ¿Y tú?
-
Yo continúo odiándolos con todas mis fuerzas, respondió el otro.
Su
amigo lo miró unos instantes, y luego dijo:
-
Lo siento por ti. Si eso es así, significa que aún te tienen preso.
Sincérate:
¿de qué o quién sigues siendo un convicto?
Cuándo
has estado libre: ¿has estado libre detrás de barras?
Cuándo
has estado preso: ¿has estado preso fuera de barras?
¿Qué necesitas para estar
permanentemente libre?
¿Qué resentimiento conservas aún? ¿Obtienes
algún beneficio?
¿Qué y a quién necesitas perdonar?